sábado, 28 de marzo de 2009

El profeta

El profeta no nació para este siglo
su descuidada barba y su roída túnica
no encuentran sitio en esta red de redes

La palabra tranquila,
la verdad calmada,
son enterradas bajo la confusión,
el ruido,
la ceguera de la Nueva Babilonia

Cuarenta años en el desierto,
cuarenta años de destierro,
no significan nada para el mundo del aquí y ahora

El profeta sólo encuentra oídos sordos
que aun así no quebrantan su voluntad de hierro
su voluntad de sueño

El profeta morirá solo,
tratado como un loco por propios y extraños,
con una sonrisa y un beso en la boca para todos y cada uno de sus verdugos
porque
¿acaso no ha sido así siempre?

2 comentarios:

julia dijo...

pues claro, el que se señala, el que intenta explicarse, el que intenta que los demás razonen por si mismos, es peligroso para este juego... los profetas nunca me han convencido, quizá por el relativismo que impera en mi mente desde hace tiempo, y que se opone frontalmente a las verdades absolutas... a no ser que el profeta sea krishnamurti... besos...

Ignacio Lobo dijo...

Hombre... aqui la palabra profeta esta usada en un sentido amplio, casi metaforico. Entiendase el profeta como ese hombre con una vision clara de la realidad y que denuncia sus vicios y su inhumanidad. Luego puedes ligar la religion o no... pero creo que la religion del profeta es el ser humano, y de ahi la defensa de su honestidad e integridad.

y claro... como molestan, se los quitan de en medio.

Gracias x la visita ^^